Paramount y Aronofsky no se ponen de acuerdo con el montaje final de 'Noah'

El estudio quiere una película "más cristiana"

THR ha lanzado la bomba. Parece que Noah, la última superproducción del director de Cisne Negro no ha obtenido los resultados esperados en sus primeras exhibiciones de prueba ante algunos de los sectores pertenecientes a distintos credos. Concretamente, la cinta se ha proyectado en tres pases para el colectivo de judíos de Nueva York, cristianos de Arizona y público general de California, comunidades que han mostrado su descontento tras el visionado del film. También se cuenta que se han exhibido unos minutos del mismo entre evangelistas de Texas y parece que las impresiones han sido algo más positivas.

Las razones para el descontento inicial, tras el salto.

Las desavenencias parecen ser consecuencia de la visión medioambiental que incluye la película del amigo Darren Aronosfky. Él mismo calificó a Noé como "el primer ecologista de la Historia" y explicó que "es un proyecto muy bueno y creo que es muy oportuno porque es un Apocalipsis sobre el medioambiente, que es el tema más importante para mí en este momento porque es lo que está pasando en este planeta". Esta particular perspectiva dista del enfoque bíblico deseado por la compañía, quien ansía el montón de pasta proveniente del bolsillo de la audiencia cristiana norteamericana, que hizo que películas como La Pasión recaudaran una millonada en taquilla.

Por suerte, el realizador cuenta con el derecho de final cut, por el que un director tiene control absoluto sobre la totalidad de la película, lo que impide a un estudio meter mano al metraje según se le antoje. Con dicho privilegio, Paramount no puede más que dirigir meras recomendaciones a Aronofsky basadas en montajes alternativos.

Noah, protagonizada por Russell Crowe y con una inversión de 125 millones de dólares, tiene previsto su estreno el 28 de marzo, fecha que no es de extrañar que se modificara si su responsable termina cediendo a las presiones de la compañía. Raro es, de hecho, que no hayamos tenido a estas alturas la oportunidad de ver un tráiler.

Esperemos que Aronofsky se mantenga firme, que ya hemos salido escaldados de Guerra Mundial Z y El Llanero Solitario, por citar recientes antecedentes con catastróficas producciones.

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