Con el fichaje del guionista Anthony Peckman hace unos meses para que escribiera el guión de la secuela de El Legado de Bourne ya nos olíamos que iba a haber cambios sustanciales en la saga. Y es que el escritor de todas las entregas, levemente inspiradas en la serie de novelas de Robert Ldluum y Eric Van Lustbader, había sido hasta el momento Tony Gilroy, que se animó además a dirigir Legacy con los discutibles resultados que todos conocemos. A día de hoy, su participación en la franquicia es historia, sobre todo tras el anuncio por parte de Deadline de que el director de la próxima aventura de Aaron Cross (Jeremy Renner) será Justin Lin.
Lin, célebre por resucitar paulatinamente la saga A Todo Gas a lo largo de sus cuatro últimas entregas, también sonó en su día para encargarse de la nueva entrega de Terminator hasta que los retrasos del proyecto le hicieran abandonar la producción. Ahora, con su fichaje por parte de la firma Bourne, la idea del estudio suponemos que es la de realizar la entrega más explosiva de la saga, con lo que no nos extrañaría nada que la novela a adaptar fuera La Traición de Bourne, la inmediatamente posterior a Legacy y centrada en el ataque de un grupo terrorista armado con cabezas nucleares (lo que se dice un argumento "manejable", vamos).
La secuela de El Legado de Bourne, provisionalmente La Traición de Bourne (The Bourne Betrayal), se estrenará en el verano de 2015.
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