Darren Aronofsky por fin ha logrado la financiación necesaria (unos 130 millones de dólares) para llevar a cabo la que no ha dudado en describir como su obra más grande y personal, una revisión dramática de la historia del diluvio universal con un Noé oscuro y meditabundo. La confirmación ha venido por parte de Paramount, que se ha hecho finalmente con la mitad de los derechos del film (junto a New Regency, que firmó hace meses) y que ha puesto al proyecto en la vía rápida con vistas a rodar en primavera.
El propio realizador comentó hace unas semanas que quería a Christian Bale para el proyecto, y aunque el actor aún no ha firmado podría tener su agenda libre una vez finalizado el rodaje de TDK Rises ya que solo se ha comprometido con lo nuevo de Terrence Malick, cuyos rodajes se dilatan durante meses dejando tiempo a sus actores para intercalar otros proyectos (de hecho, durante las grabaciones de Rises Bale se desplazó a Austin para unas pocas secuencias). De todas formas, sea quien sea su protagonista, se me ponen los pelos de punta con solo imaginarme al personaje gritándole a la tormenta desde la cubierta del arca bajo el timón de Aronosfky.
Vía Collider.
1 COMENTARIOS:
Buena pinta tiene, sí señor. Aunque la última de Aronofsky no me gustó demasiado reconozco que es un director a tener muy en cuenta, y en este caso se presenta realmente interesante.
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